Más allá de la Sección Oficial
La edición de este año del SeFF se ha caracterizado por una propuesta más ambiciosa al ampliar el número de secciones y, en consecuencia, potenciar el reconocimiento de más películas mediante nuevos galardones.
Así, es la primera vez que el Festival de Sevilla concede el Premio Puerta América, una selección que ha incorporado las películas de las distintas secciones del Festival que van a representar a sus respectivos países en la candidatura al Oscar a mejor película internacional.
Este premio ha sido otorgado a la película Flow, dirigida por el lituano Gints Zilbalodis, y que ya ha sido galardonada en la Sección Oficial, como hemos reflejado en entregas anteriores. Un filme de animación, sin diálogos que busca la emoción haciendo pasar a sus personajes por situaciones difíciles, buscando promover un mensaje de esperanza y resiliencia en tiempos de tragedias.
En la Sección Las Nuevas Olas, que busca reconocer propuestas originales que navegan en «aguas menos transitadas», según reza el programa del Festival, ha sido premiada The flame of a candle, del director y guionista portugués André Gil Mata. La historia se inspira en la convivencia que durante 60 años han mantenido la abuela del propio director y su criada, que habitaron juntas una casa a las afueras de Oporto.
El jurado de esta sección ha destacado «el manejo sutil de los temas de la vida, la muerte, la memoria y la decadencia a través de un estilo cinematográfico radical que explora los límites del espacio y el tiempo, dando a entender que los lugares existen incluso sin nosotros, imbuidos de nuestras historias y recuerdos personales».
Asimismo, el jurado de Las Nuevas Olas ha concedido una mención especial a la película Prefiero condenarme, de la directora y guionista gallega Margarita Ledo Andión. El jurado ha justificado esta decisión por «la importancia de recuperar el empoderamiento de las mujeres, las historias del pasado que fueron silenciadas no solo políticamente sino cinematográficamente; por todas esas mujeres cineastas que no tuvieron voz; por la necesidad de contar las historias injustas y olvidadas de nuestras abuelas y madres».
El cineasta Aitor Echeverría, que competía en la Sección Oficial con Desmontando un elefante, ha sido el ganador del Premio AC/E a la mejor dirección de película española, concedido por Acción Cultural Española, por «una película conmovedora, con una dirección intimista y una aguda mirada fotográfica, todo ello apoyado por un reparto impecable», según el jurado, que ha añadido en su fallo que se trata de «una exitosa ópera prima».
La Selección EFA, un apartado clásico del Festival de Sevilla que presenta algunos de los largometrajes prenominados a los premios que otorga anualmente la Academia de Cine Europeo (EFA). Este año ha tenido un gran nivel, dando la oportunidad a los espectadores de poder ver títulos ya laureados internacionalmente y comentados por nosotros en artículos anteriores dedicados a esta edición del Festival de Sevilla, como es el caso de Emilia Pérez, Vermiglio o La semilla de la higuera sagrada.
El Premio del Público a la Mejor Película de la Selección EFA, ha recaído en Segundo premio, película musical dirigida por Isaki Lacuesta y Pol Rodríguez, y escrita por el propio Lacuesta y Fernando Navarro; se trata de la candidata por España como mejor película internacional en los próximos Oscar.
El jurado de la sección Rampa, otra de las novedades en esta edición del Festival de Sevilla, que busca apoyar a cineastas incipientes, en sus primeras o segundas películas, ha reconocido como mejor cinta a Drowning Dry, del director y guionista lituano Laurynas Bareiša, por «su capacidad para inquietar con los elementos mínimos, su uso del plano secuencia y el fuera de campo, (…) y una de la más agudas y perversas lecturas de la masculinidad tóxica que hemos visto en el reciente cine europeo».
Igualmente, ha incluido en su fallo una mención especial a la actriz italo-francesa Valeria Bruni Tedeschi por «su interpretación tan descarnada como tierna y llena de humor» en el film Somewhere in Love.
También nueva este año es la sección Alumbramiento, que pretende apoyar películas que han quedado al margen de la distribución, pero que contienen valores de interés. Con este planteamiento, el jurado de la crítica internacional (Fipresci) ha decidido premiar como mejor película Lads, primer largometraje de ficción del director francés Julien Menanteau (también coguionista junto a Nour Bem Salem), por «su sólida y enérgica propuesta narrativa que retrata, con gran capacidad visual y plástica, un mundo singular».
En esta sección el jurado ha concedido una mención especial a O vento assobiando nas gruas, de la directora y guionista suiza (afincada en Portugal) Jeanne Waltz, por «su arriesgada y simbólica propuesta sobre un universo de relaciones interraciales e interclasistas».
La sección Panorama Andaluz que los organizadores del Festival han querido impulsar en esta edición ampliando su dimensión hasta 15 largometrajes; buscando reflejar una propuesta que recoja la realidad del cine andaluz contemporáneo. El premio a la mejor película de esta sección ha sido para Los restos del pasar, dirigida y escrita por Luis (Soto) Muñoz y Alfredo Picazo.
Igualmente, el jurado de esta sección ha concedido una mención especial al filme Caja de resistencia, con dirección y guion de Concha Barquero Artés y Alejandro Alvarado Jódar, un documental que reivindica Rocío (1980), un fascinante documental dirigido por Fernando Ruiz Vergara que fue secuestrado judicialmente, censurado y mutilado, ya en tiempos de democracia, que trataba sobre la represión franquista en Almonte. El jurado ha valorado «el riesgo creativo» de Caja de resistencia considerando que esta mención «cierra un círculo tras el premio al documental Rocío en el Festival de Sevilla de 1980».
Balance final
En esta edición número 21 del Festival de Sevilla se han programado un total de 168 títulos, de los cuales más de la mitad (86) han sido estrenos en España y 21 de ellos eran estrenos mundiales o absolutos. Los organizadores han señalado que se han superado los 58.000 espectadores en salas, mejorando los números de ediciones anteriores.
La presencia de estrellas internacionales ha otorgado visibilidad e impacto mediático al Festival. Así ha sido en el caso de Johnny Depp, David Puttnam o Jeremy Irons, estos dos últimos premiados con el Giraldillo de Honor en reconocimiento a sus respectivas trayectorias; también ambos han sido miembros del Jurado de la Sección Oficial.
En el ámbito nacional, han asistido artistas reconocidos como Albert Serra, Gerardo Herrero, Benito Zambrano, Emma Suárez, Natalia de Molina, Paco León, Margarita Ledo Andión o Quim Gutiérrez, entre otros muchos.
Entre las ocho secciones competitivas de esta edición se han presentado 21 primeros largometrajes u óperas primas, lo que demuestra el compromiso y apoyo del Festival con los nuevos talentos del cine europeo y español.
Del mismo modo, entre las secciones no competitivas se han estrenado películas cuya participación del continente europeo es minoritaria pero fundamental, y gracias a la cual se ha ampliado la variedad de nacionalidades presentes. En consecuencia, 53 países de todo el mundo se han visto representados en esta edición del Festival de Sevilla con sus producciones o coproducciones, incluyendo nacionalidades como Argentina, Australia, Brasil, Cabo Verde, Canadá, Catar, Estados Unidos, Filipinas, India, Irán, Marruecos, Mongolia, Mozambique, Palestina, Singapur, Somalia, Taiwán, Túnez, Uruguay o Vietnam.
En definitiva, una exitosa edición del Festival de Cine de Sevilla, que ha superado el bache que supuso la edición anterior, y que parece haber consolidado una personalidad propia (fortalecimiento y apoyo del cine europeo) en el abigarrado panorama de festivales cinematográficos que copan el calendario español.
Escribe Juan de Pablos Pons
