Calma y sosiego contagiables

Coincide en el tiempo mi lectura del interesantísimo libro de la científica Nazareth Castellanos titulado Neurociencia del cuerpo con el estreno en la plataforma Filmin de Reset con Xuan Lan, la serie de la gurú del yoga que hoy disfruta de más de setecientos mil seguidores en su cuenta de Instagram Xuan Lan Yoga Meditación & bienestar.
Y como las casualidades no vienen solas, resulta que al final del segundo capítulo de los tres que componen la serie se anuncia la participación de la misma Nazareth, así que esta pequeña coincidencia despierta nuestra curiosidad y nos disponemos a su visionado.
Y una vez vistos el trío de episodios solo podemos decir que nos hemos llevado una sorpresa de lo más agradable. Para alguien que no es muy ducho en la materia de los beneficios de la práctica del yoga este Reset puede ser una buena puerta de entrada a un universo tan atrayente como reconfortante. Y lo cierto es que te quedas con ganas de más.
La entradilla de cada programa nos advierte del mundanal ruido que soportamos a lo largo de nuestra vida, así como los desmanes y descuidos que proporcionamos a nuestro propio cuerpo y los malos hábitos inconscientes que acumulamos tanto en temas alimentarios como de descanso. El contraste viene servido en bandeja de plata. Se nos proponen tres visitas a tres de los más importantes centros de recogimiento existentes en nuestro planeta y allí nos quedaremos boquiabiertos ante lo maravilloso de lo expuesto.
Sri Lanka, Mallorca y Yucatán en México son los tres destinos escogidos por la protagonista del documental para ahondar en los diversos estados en los que se nos revelará como puede mejorar nuestra vida. Se empieza con una breve conversación con el director de cada centro en la que ya podemos atisbar que nos hallamos ante personas en los que el estrés no es que haya hecho mella en ellos precisamente. Sus consejos son de una claridad diáfana y de una simpleza tal que parece mentira que no hayamos caído en la cuenta.
¿Por qué no hay silencio en nuestras vidas? ¿Por qué no dedicamos algo de nuestro tiempo a conocernos mejor y a reflexionar sobre lo que no nos conviene? ¿Por qué no trabajamos la amabilidad y la compasión por el prójimo y para nosotros mismos? Estas y otras cuestiones similares se abordan desde el ámbito de quien ya ha experimentado estos parabienes y ahora se dedica a enseñar a los iniciados —y a los que no lo están— los beneficios de abandonar un modus vivendi sedentario.
Una vez hechas las presentaciones empieza lo bueno y Xuan Lan ejerce en ocasiones de profesora y en otras de alumna, y siempre de muy buena guía. Las distintas sesiones de yoga están garantizadas, así como los distintos tipos de cuidados específicos que cada lugar ofrece.
Una premisa esencial que no hay que dejar de resaltar es el hecho de que los móviles se quedan en los cuartos de los huéspedes. Algunos se echarán las manos a la cabeza cuando no los tengan a mano para hacerse un selfie ante los espectaculares parajes a los que van a asistir, pero luego afirmarán que mucho mejor es quedarse con el recuerdo de esos intensos instantes vividos que estar perdiendo el tiempo haciendo saber al resto de los mortales lo bien que lo están pasando.
Aquí no vamos a destripar lo que ocurre en cada periplo de relajación extrema, más que nada porque la gracia de la serie está en ir descubriendo paulatinamente de qué se trata ese reinicio o pausa que nos propone Xuan y cómo podemos ir interiorizando todas las sabias palabras y consejos que se vierten a lo largo de los breves cincuenta minutos que dura cada episodio.
De todas maneras, y a modo de ejemplos puntuales, vamos a citar dos o tres actividades que nos han parecido muy atractivas a la par que curiosas. La primera tiene lugar en el retiro de Artá, y tiene que ver con una sesión de musicoterapia consistente en un baile amenizado por los sonidos electrónicos de una DJ. El nombre exacto del ejercicio curativo es Ecstatic Dance, y el de la Dj Andrea Lacoste.
A cada participante se le ofrecen unos auriculares para que la experiencia sea mucho más introspectiva, y así contemplamos cómo las danzantes entran en una envidiable comunión con la naturaleza mientras van moviendo el esqueleto cada una a su aire. Apuntada queda la actividad y, aunque uno no tenga presupuesto para agenciarse a una profesional de las platinas, sí puede aislarse en su propia introspección mientras escucha y baila un tipo de música que conecte con el espíritu.

Sin salirnos de Mallorca (cualquiera se va de allí con el espectáculo de bellos rincones que se gastan en es Racó D’Arta) veremos cómo Xuan va a recibir literalmente algo más que un jarro de agua fría cuando se atreva a darse un baño helado (entre cero y cinco grados, ahí es nada). Los placeres se multiplican, pero también hay que sufrir un poco, y la pobre acaba experimentando algo parecido a quedarse como un témpano. Y si de pasarlo mal se trata, para después sentir la depuración, tanto interna como externa, no hay que perderse lo que acontece en el capítulo mejicano que cierra la serie.
Atónitos nos hemos quedado con algunas de las prácticas que allí se llevan a cabo. No es que no nos fiemos de que los resultados después de la aplicación de dichas terapias no sea el más optimo, y así lo ratifican los asistentes, quienes se encuentran entusiasmados ante unas experiencias como mínimo potentes.
Citamos dos: en un ritual de fuego pasan una hora metidos en una cabaña cerrada a cal y canto mientras sudan como pollos y soltando toxinas como si no hubiera un mañana, una actividad desde luego no apta para quien padezca claustrofobia; mientras que, en la segunda terapia, la protagonista del documental vuelve a ejercer de conejillo de indias y se somete a una sesión de masaje bastante heavy metal que en algunos instantes parece más un exorcismo que otra.
Pero no hay que asustarse, porque la mayoría de las sanaciones y demás tratamientos terapéuticos que van apareciendo son de una calma y sosiego contagiables. Armaos de una buena libreta e id apuntando conceptos como pranayama (regulación de la respiración), caminatas conscientes, rituales de autocuidado, alimentación beneficiosa para el microbiota y demás recomendaciones y sugerencias que os van a ir convirtiendo en personas más apacibles y sanas.
Para finalizar, comentar que a lo largo de cada capítulo se van intercalando breves entrevistas a expertos y entendidos en muchas de las materias que aquí se tratan: aparte de Nazareth Castellanos (a quien ya citábamos al principio de la reseña, por el XLYStudio, centro de operaciones situado en Barcelona donde Xuan Luan lleva a cabo su labor de divulgación del yoga), desfilan personalidades de la talla de Xavier Pellicer, chef y experto en biodinámica y ayurveda; Nuria Roure, doctora del sueño (ya he pedido a la biblioteca de mi pueblo que me traigan su best seller Por fin duermo, a ver si acabamos con el insomnio de una vez por todas); Pablo D’Ors, sacerdote, autor y experto en meditación; Gemma Bes, nutricionista y asesora de deportistas y empresas; Silvia Congost, psicóloga experta en relaciones humanas, y otras muchas que enriquecen y de qué manera una serie que ya de por sí tiene los alicientes suficientes para no perdérsela.
Escribe Francisco Nieto | Fotos Filmin